Hormiga en México

Yo estaba muy bien. Como que las feromonas salvadoreñas me daban confort. Ya sabía cómo moverme, dónde moverme.

Aquí todo es muy muy grande. Y soy como la hormiguita que se movio de la fila y anda toda perdida.

Además hay cosas que me cuesta asimilar:

1. Que los taxis no sean amarillos
2. Que los buses valgan todos diferente y que no tenga ruta si no sólo rótulos de destino y que no hayan cobradores gritando donde van y convenciendo de subir
3. Que los semáforos sean veriticales y no horizontales.
4. El metrobús y su tarjeta inteligente.
5. Que no soy turista y que donde vivo no es temporal, si no que debería llamarlo casa.
6. Que hayan monedas que valen aproximadamente $1
7. Que el frío no es del aire acondicionado.
8. Que no hay star mart o On the run, porque no hay gasolinera que no sea PEMEX.
9. Que hayan OXXOs y 7/11 que parecen start mart y On the Run, pero que les falta la gasolinera.

...

Y mejor no sigo.

Extraño mucho mi país. Es mi desorden. Mi país con sus defectos. Pero mío. Y sí es un País bonito. Envidiable en muchas cosas. La cultura y todo eso. Pero no es mío.

Nuevo look de blogger y un medio update

Ando como loca y la verdad es que dizque me pongo a arreglar mi cuarto, y pura bichita, tengo todo en el piso, pero nunca que boto nada je je je.

Pues tengo que agradecer a todo el mundo que anda pendiente de mi viaje, que medio le contesto en mis entradas fugaces a los chats.

Y nada ya me compre la maleta que faltaba y estoy en la disyuntiva que tengo demasiadas carteras y me las quiero llevar je je je.

Tenia ratos de no entrar al blogger y esta un poco diferente, ya lo voy a ver.

Probando, Probando

Bueno primer post desde mi laptop. Le tengo que configurar el teclado porque esta en ingles y por eso veran mi carencia de acentos y de enies.

Tengo mi titulo apostillado como Dios y el Acuerdo de la Haya mandan.

Fui a lo de Centro Cultural de Espania por lo que me siento bastante bien. Siempre me pongo nerviosa pero cada vez menos.

Tengo ya el vestido (prestado je je) para la boda del sabado, con zapatos, carterita y chalina. Me faltan los accesorios.

Mi laptop ya tiene mochilita.

Me falta una maleta de 50 lbs (acepto donaciones, porque bueno es pedirla prestado para dos anios) y tengo que ver cual sera mi equipaje de mano.

Tengo que depurar mi closet!!!


Tengo que y tengo que y tengo que.

Bonito el verbo "tener que".

Nueva Palabra

8 del 8 del 2008

Yo tengo unos amigos que les encanta el 8.

La Carmen siempre dijo que se iba a casar en esta fecha.

Y hoy se casa. La verdad es que no lee el blog. Pero le dejo un poco buena vibra en este mundo virtual.

La familia, la propieda privada y... No, no era así.

Ante la situación que me pasan demasiadas cosas. Los títulos de mis post han caido en un excesivo número de palabras y que además no dicen nada.

Además me pasan muchas cosas y uno quisiera que este diario (ay querido diario!), o lo que sea que es esto tuviera mejor suerte que otras cosas que me encuentro por ahí.

En lo de limpiar las cosas cuando uno se va se topa uno mismo con uno mismo. Y dice "Hola". Y a veces no se reconoce. Encontré un poema mío. Nomás lo vi, me acordé que lo había escrito al pobre tan huérfano de madre. Y la verdad fue como que no me reconocí a mi misma. El texto, porque después busque su versión digital (porque soy un desastre que escribe en todos lados y siempre todo termina en gmail, que por cierto ya voy a topar esta segunda cuenta dice: You are currently using 6560 MB (93%) of your 7005 MB), y el bendito texto data de mayo de 2007. Nomás lo leí vi qué terrible el uso de la palabra fetidez (qué fea palabra) su casi imposible sustitución y por lo tanto llegué a la conclusión de que inexorablemente debo eliminar por lo menos dos o tres versos.


Ayer fue mi primera despedida, despedida, despedida. Pues me despedí de un amigo que se iba de viaje y que cuando regrese pues, ya no voy a estar y lo más probable es que también parta a otro lado del planeta. Debo decir que soy una cobarde para las despedidas. Y que eso sólo me hizo enfrentarme a que voy a tener que despedirme de todo el mundo y creo que no estoy lista. Voy a dejar una nota en mi cama, un post it rosado que diga: Vale por una Ana. Y no sé. Desapareceré. O mejor aún, tipo pastilla de chiquitolina, andaré por ahí, jugando entre los juguetes, me voy a ir a Juguetón y jugar ahí. Basta Ana, hay que crecer. Y lo malo de aparentar 15 años, es que uno quisiera tenerlos y a veces por pensar que se puede engañar a la gente, pues me da eso de ser una niñona de primera. Y no me engaño a mí.

Soy Ana y tengo miedo. Soy una Ana de 24 años aterrada.

Y en esas cosas pensaba cuando me dormí. Y qué tiembla horrible. Yo le tengo pánico a los temblores, me asustan más que las despedidas, sólo un poco más. Me desperté. Corrí. Se me cayó el pantalón y mi hermano me dijo que por favor me lo pusiera si pretendía salir. Me puse el pantalón pero no salí. Después ya no me pude dormir. Pensé en que cuando me han leído la mano me dicen que me voy a morir joven. La última vez la tipa me dijo algo como "Disfrute su vida", ja! Y luego mis sueños con dientes que se caen y todo lo demás. Y la papalota negra que tiene como dos semanas de andar en la casa. Y me dije: Ana no te quedan bien las supersticiones. Y déjate de cosas. Que este es tu mismo miedo a lo mismo(de irme, ser otra, ser nueva, etc. etc.) y no a la muerte. No engañás a nadie. Y me dormí.

Pero no por mucho tiempo. Porque tenía que ir al Lago de Coatepeque.

Me desperté a las seis y media. Tenía que ir por la Doris y el Pato.

Y todo fue una cosa maravillosa. El lago es super bonito y no lo conocía.

Manejar en carretera es lo máximo. Y qué bonito el paisaje de este país en invierno. Mi parte favorita es ahí por San Andrés, camino a Santa Ana, donde los árboles se juntan arriba. Creo que de todos los caminos ahí me encanta pasar. Y nunca había pasado siendo yo piloto.

Y fue como borrar a la Ana que no había podido dormir. Ana: Hace un año ni podías manejar. Hoy tenés tu propio carro y andás aquí manejando en carretera y bien. Y la verdad sonreí. Y disfruté mucho. Hasta el camino feito ya llegando a lago que está como de piedra (pobre carrito mio, pero no me decepciona, además ni cuarto de tanque se echó, es lo máximo). Y es que ya no me daba miedo la carretera y ni cuenta se da uno, cuando ya no tiene miedo.

Y hoy no voy a pensar ni en papalotas, ni en lecturas de mano, ni en nada de eso. A lo mejor piense en las cosas que vienen: ir al banco, ir a cambiar las millas, ver lo de la tarjeta, ir al ministerio de hacienda, ir al ministerio de relaciones exteriores por lo del apostillaje, ir a comprarme un jeans, todas las fiestas de despedidas, la boda de la carmen, ir a los eventos del libro, etc. etc. etc.

Y SOBRE TODO: MAÑANA ME DAN MI LAPTOP

Yeah!

(qué fresón ese yeah...)

La vida del que no trabaja y algo (más) para el ego

Pues sí. Es raro esto de no trabajar. Lo primero que estoy haciendo es reducir la pila de libros "por leer". Lo más raro es que nunca había estado leyendo tantos libros al mismo tiempo y lo más peculiar es que todos son libros de salvadoreños. Estaba con la onda de leer "Pueblo de Dios y de Mandinga" y "Mágica Tribu" de Claribel Alegría. Qué cosas esos libros. Son una emoción. El primero es una colección de tres novelas cortas muy buenas. El otro es un anecdotario que me ha gustado tanto que lo he dejado de leer! (¿cómo así? pues es un libro que quiero leer en el avión cuando vaya para méxico, debe ser un libro histórico).

Luego tenía que leer a mis compañeros de colección. El único que había leido era el de Johanna y me gustó. Y ahí la voy llevando con el resto. Leo un texto de cada uno y así voy. Además lo estoy intercalando con un libro mal puesto que me robé por ahí de "Mediodía de frontera" de Claudia Hernández. Claudia Hernández cada vez me impacta más. Sólo había leido "Olvida uno" y otras cosillas sueltas que se encuentran en el internet. Pero es una maravilla. Realmente sumamente recomendable. Estoy pensando también de llevármelo en el avión (Es que voy a hacer una parada técnica en Guate de tres horas... debo ir preparada)

Además, tengo el "Sueño de Mariana" de Jorge Galán. Realmente nunca me imaginé que fuera una novela de ciencia ficción. Quizás por tan poeta el autor, nunca me lo imaginé en una narrativa de ciencia ficción. Pero está bien interesante.

¿Cuándo terminaré de leer? No lo sé. Pero es que creo que estoy entusiasmada con esto de ya no tener un horario de 8 a 5.


Luego, lo que va para el ego propio de este post, es que leyendo Contrapunto, me encontré con algo bien bonito. En la sección de Opinión Manlio Argueta hace una reseña de mi libro. Es muy similar a lo que leyó el día de la presentación. Y yo no podría estar más agradecida de leer lo que escuche ese día. No sólo por lo que dice, sino por quién lo dice. La nota se titula Literatura Joven de El Salvador.

Nos vemos y vayan a la bajada. Intenté ir a las ruedas... pero todo está muy lleno y mis ganas por churros españoles no llegaron a tanto. Me he quedado sin ir.

Arena

-Ayer soñé que me tomabas de la mano y de repente te convertías en arena
- Qué cosas las que soñás…
-Pero lo extraño es que yo sentía como vos te convertías en arena, así entre mis dedos
-¿Cómo se siente eso?
-Pues es algo como un estornudo más un suspiro más algo efervescente
-No se puede soñar eso
-Pero así lo soñé
-Mañana habrá más lluvia y las comunicaciones se cortan
-Lo sé
-¿Efervescente?
-Sí
-¿Como la Sprite o algo así?
-Aquí está algo seco. Sí, como la Sprite. Pero sin el azúcar.
-¿Agua mineral?
-Que lloviera agua mineral
-Para ser arena
-Pero soñé que me tomabas de la mano
-…
-Salud
-¿Estornudaste?
-Es el viento, enferma.
-…
-¡No suspirés!
-Tranquilo, aún nos falta el agua mineral