Pues ya estoy de vuelta.
Odio ver que la gente se sigue muriendo en Gaza. Me parece indignante. Entiendo que El Salvador (lo entiendo con odio, el que sentí ayer viendo la entrevista de megavisión con la canciller, donde parecía un periquito diciendo que la culpa de Hamas), o bien entien que yo, Ana, Anita, no podamos hacer mucho al respecto, pero me enoja que TODO el mundo y las grandes potencias se queden así sin hacer nada.
Bueno catarsis aparte voy a mi update narcisista, ególatra y fuera del mundo real:
El lunes me fui de El Salvador. Después de dejar olvidados mis quesos petacones en la refri, llegué al aeropuerto con ayuda de mis queridos padres. Es extraño como se pueden disfrutar los detalles más ínfimos hasta como la publicidad de la carretera, el paisaje, mi mamá poniendole la mano en la pierna a mi papá mientras maneja, los conos inexplicables que dejan los policías, todo porque uno sabe que tendrá mucho tiempo en no ver muchas cosas. Llegando al aeropuerto me fui a hacer fila, vi que había una cola horrible y me afligí a pesar de estar dos horas antes de que saliera el vuelo ya habiendo pre-chequeado. Pero la cola era sólo para los que viajaban a otro lado. Me mandaron a una donde yo era la segunda, especial para México y Centroamérica. Y yo pues bueno. Dejé mi maleta, la confié con sus 52 libras (la soqué, pensé que me iban a cobrar) y ya me fui a buscar a mis papás. Nos metimos al Pollo campero que estaba extrañamente vacío y me tomé el último café en El Salvador. Luego, nada a irme de nuevo. Casi lloro, pero no, no y no. No lloré. Me metí a abordar, me hicieron quitarme los zapatos y me fui a la sala 10 y me senté. Justo en ese momento dicen que me toca en la sala 12 y revisó mi ticket de abordaje y sí, quién me dijo que era en la 10, no lo sé. Así que me fui a la sala correspondiente, que ya estaba llena de suramericanos, sobretodo argentinos. Me tocaba en el asiento 10 A. No me parecía que tuviera nada de malo cuando hice el prechequeo... pero tocaba en fila de emergencia!! Lo que significa que no se pueden hacer para atrás y mi plan de dormirme las casi 2 horas de vuelo se esfumó!!! Bueno, me tocó ver la serie Numbers y ya está. Esa serie es como bien regularona. Al final es bien predecible. Pero el tiempo pasó rápido. Debo quejarme que mi vuelo decía que me iban a dar cena y me dieron una cosa ínfima!!!
Llegar de noche en avión al D.F. es una gran onda. Se podía ver como un bordado de oro en la tierra, las luces de toda la ciudad en pequeños hilos dorados y plateados, con diferentes tornasoles. Me quedé como pasmada todo el aterrizaje y ni me di cuenta del gran bajón que hacen los aviones para aterrizar en ese aeropuerto. Llegué tipo 9 y media y pensé que había llegado temprano. Pero no! Para empezar hacian falta como 10 minutos en lo que el avión llegaba a la puerta que tenía que salir. Y luego me fui por las maletas.
Y esperé.
Y esperé.
Y buscaba cada vez que la banda se movía 5 cm.
Y luego se paraba.
Y nada.
Y apareció mi maletita tan negra con líneas celestes.
Con el agarradero arruinado!
Pero estaba muy cansada para enojarme.
Y me fui a la fila de aduana. Me salió verde. Pero oh no! Me tenía que revisar el policía federal:
Momento idiota 1 con el policía federal:
-¿Con quién viaja?
-Con TACA
-¿Con quién viaja?
-Con TACA
-¿Con quién viaja?
-Con TACA!!!
-¿Viaja usted sola?
-Ah! sí.
Momento idiota 2, pero más simpaticón, con el policía federal:
-Se ve más chiquita de lo que es!
-Sí -dije, aunque había querido decirle: "Ay ya se dio cuenta de que soy una espía internacional"!
Momento idiota 3, más idiota, con el policía federal:
-¿Y esto es un cuaderno o un diario?
-Supongo que un cuaderno -- supongo que era una pregunta de seguridad nacional!
Luego me fui con mi maleta arruinada, después de tenerla que subir con gran esfuerzo a la mesa del policía federal sin ayuda del policía federal. Y salí en busca de un taxi autorizado. Y oh no! Me vieron la cara, pagué por un taxi-camioneta que cuesta más que uno normal!! Y ni me fije por todo el estrés de que ya eran las 11 y media.
Llegué al apartamento tipo 12, entré y mi apartamento era otro. Mi buena compañera lo había remodelado: con cortinas, con mantel en la mesa, con los platos en la parte de arriba del pantry y no en las gavetas! Una maravilla!!!
Y fui tan feliz!!!
Luego la dura situación, me dice mi compañero que no había podido encender el boiler. Al día siguiente casi gastamos todos los fósforos encendiendo. Como ser extranjero no ayuda no sabíamos que el boiler es una cosa y la cocina es otra y que si no encendía la cocina era problema del gas. Gracias vecina!!! je je je. Así que llamé a la compañía de gas natural. Después de tres mil veces de oir "marque tal número" me atendieron y dijeron que mandarían alguien por la baja presión. Y luego el boiler encendió. Y la cocina encendió. Lo que no borró la bañada con agua helada del día de reyes que me dí.
Y ni modo. La triste realidad. La vuelta a clases.
Y cuando pensaba que no tendría más vacación, pues hoy jueves resultó que la profe andaba en Chile y tuvimos día libre me fui al convento de Churubusco, a la casa de Trostky, a comer mercado de Coyoacán, a la Casa de Frida y a la Cineteca a ver Vicky Cristina Barcelona. Y heme aquí, después de contestar muchos correos, bajar y subir algunas fotos y con ganas de expresarme je je je.
Cambio y fuera!