domingo, 1 de febrero de 2009

De cómo no debo ir ni acompañar a las librerías

-Necesito comprar un libro para mi exposición.

Y eso me dijeron y acompañé. Me dije: "Ana, vas a acompañar, pero no vas a comprar nada".

Ante eso me alejé lo más que pude los estantes de literatura.

Nada.

Que el libro es de niños.

Sección de niños.

"Wilson chiflado"... y se me puso el corazón contento... Ver ese libro y tantos más que leí de chiquita. Creo que el momento de mi vida en la que leí más fue entre los 9 y 11 años. Luego nada importante. He leído, pero digamos que no tanto.

Pero me contuve.

Ya, cerca de la caja.

Libros en oferta.

"La economía de Michal Kalecki y el capitalismo actual. Ensayos de teoría económica y economía aplicada".


Umm


No lo logré.

Se me olvida que también soy economista... y fue bueno recordármelo. Que vaya a leer el libro en el corto plazo, está verde con tanta tarea, pero creo que me sentí bien de consentir a ese lado de mí misma. :D

9 comentarios:

  1. También soy algo compulsivo para los libros, sólo que a mi me los regalan. Tengo una torre, prácticamente, de los pendientes, y sin contar los que quiero leer de nuevo o los que tengo en digital. El que estoy leyendo ahorita es "El general en su laberinto" (lo que me lleva a que, con tanto pendiente, me siento como "El Gero en su laberinto").
    También tengo un libro que me transporta a mi infancia: "El mono imitamonos", fue el primero que leí.
    Saludos.

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  2. Por eso es que no me he vuelto a asomar por una...

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  3. Mira, el capitalismo o quizá mi sentido común no me deja gastar demasiado en libros, pero si selecciono mucho lo que compro. No puedo ir a tomar un café con alguien a Galerías porque salgo comprando algo en La Ceiba. De ahí necesito un par de Roque que me faltan.

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  4. ¡Qué maravillosa forma de consentirte!
    Y bueno... si encuentro más personas como tú y Virgina, creo que me conviene poner una librería xD

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  5. Uuuuy, eso peor que ir a una pastelería estando a dieta, se te empiezan a hacer agua las neuronas y al final acabas cediendo y culpándote.

    Así son los placeres.

    ¡Saludos!

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  6. Los libros son un guilty pleasure! valen la pena la vdad...

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  7. Anuchka: te dije que fueras a las librerías, que son muy buenas... Claro, se me olvidó advertirte que hay que ir sin tarjeta bancaria, sin chequera, sin pisto... o con una amiga (o amigo) que se quede afuera con todo eso.

    Pero no, no es grave. Ya vas a tener tiempo para leerlo.

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  8. mmmm, los economistas no leen libros. los economistas leen numeros y maximizan utilidades.

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